El Asma es una enfermedad crónica donde los bronquios (las vías que conducen el aire a los pulmones) se inflaman y se estrechan, lo que dificulta la expulsión del aire al exhalar. La Organización Mundial de la Salud (2017), estima que hay 235 millones de personas en el mundo que padecen esta enfermedad.
Algunos de los factores de riesgo asociados a esta enfermedad son: los antecedentes familiares, alergias, sobrepeso u obesidad, ser fumador o estar expuesto al humo de tabaco de otras personas.
Los síntomas más comunes son:
Algunos desencadenantes del asma son:
Para reducir la gravedad de la enfermedad se debe evitar los desencadenantes mencionados anteriormente además de las siguientes recomendaciones:
El asma no tiene cura, sin embargo, es posible controlarla con los tratamientos adecuados, lo cual permite a las personas que la padecen, disfrutar de una buena calidad de vida.
No permitas que el asma te detenga, ¡Sigue tu plan y tratamiento para disfrutar cada momento!
7 de mayo, día mundial del asma.